Desde 1817 Identidad y Tradición
En 1817, la pastelería Cova abre sus puertas justo al lado del célebre Teatro alla Scala, en el elegante centro de Milán. Nacido como café literario, Cova se afirma como una de las realidades históricas más importantes de la época. Un café refinado, punto de encuentro de la sociedad después del teatro y lugar de reunión de los patriotas del Risorgimento: Cova ha visto entre sus muros a la élite de la alta sociedad comprometida. El Caffè Cova se convierte pronto en el local preferido de artistas de renombre mundial, como Giuseppe Verdi y Giacomo Puccini. En 1950, Cova se traslada a Via Montenapoleone, corazón del cuadrilátero de la moda milanesa en plena ascensión, donde ha continuado transmitiendo la prestigiosa tradición del savoir-faire italiano. Hoy, rico en una historia que trasciende dos siglos, Cova es una institución que rinde homenaje a la competencia y a la creatividad de los artesanos especializados. Entrar en la Pasticceria Cova equivale a perpetuar una ceremonia atemporal, caracterizada por chefs expertos que preparan meticulosamente productos refinados, camareros elegantes que infunden una sensación de cálida bienvenida. Es un lugar donde se encuentra el mundo de la moda y los negocios junto a una clientela cosmopolita, animados por el deseo de respirar la atmósfera única de Cova, auténtico baluarte de la tradición italiana.
1817
Corre el año 1817 cuando Antonio Cova abre el "Caffe del Giardino" al lado del Teatro alla Scala. Las salas deslumbrantes de espejos y candelabros se convierten en el punto de encuentro del bello mundo de la época y huelen a espíritu patriótico, animado por el fervor anti-austriaco de los espíritus de la época.
Montenapoleone 8
Destruido por los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial, en 1950 el Cova se traslada de la sede original al actual sitio de Via Montenapoleone 8, donde se convierte en un salón elegante y refinado, reproduciendo muebles y ambientes tomados de los originales.
Internacional
La expansión internacional de la marca comenzó en 1993, cuando Cova abre en Hong Kong SAR su primera tienda fuera de fronteras. En 2013 se convierte en parte del Grupo LVMH y continúa su expansión en el mundo. Nacen así boutiques de Pasticceria en China, Taiwán, los Emiratos Árabes y en la cercana Mónaco. En 2021, en el contexto de la reestructuración de La Samaritaine, abre Cova Paris.
Tradición
La historia de Cova se entrelaza con la de la ciudad y sus momentos más representativos. Punto de encuentro de una clientela cosmopolita, de burguesía y nobleza, el Cova entra a pleno título en la historia y en las historias de Milán.
Antica sede en Via Manzoni esquina Via Verdi.
"Avría querido estar en Milán con ella: llevarla a cenar al Cova, y luego caminar por la Via Manzoni" escribía ya en 1929 Ernest Hemingway en su "Adiós a las armas".
Foto histórica de la Piazza della Scala y el Teatro.
Caffè-ristorante e Pasticceria Cova, angolo de Via Manzoni y Via Verdi
Foto histórica de la Piazza della Scala y el Teatro.
Caffè-ristorante e Pasticceria Cova, angolo de Via Manzoni y Via Verdi.
Giuseppe Verdi pasea frente al Cova. Él que en la mesa "social" comparte pasiones y aspiraciones personales, consumiendo ávidamente uno de los productos de la tradición: el clásico Panettone.
Experiencia
La cortesía y la acogida son puntos fijos del arte de recibir, que busca servir a la clientela con elegancia, gusto y discreción. Uniendo una presencia atenta al más mínimo gesto y la cordialidad de profesionales del sector, nace un ambiente refinado donde música suave, manteles de lino y sofás de terciopelo acogen a exponentes del jet set, viajeros empedernidos y simples curiosos.
Pasión
La selección escrupulosa de las materias primas, la aplicación de técnicas de pastelería consolidadas, el respeto por la herencia de la tradición son los elementos de una búsqueda diaria de la calidad. Cada creación interpreta una historia de 200 años y expresa el arte y la sabiduría de verdaderos maestros del gusto.
Elegancia atemporal
La selección escrupulosa de las materias primas, la aplicación de técnicas de pastelería consolidadas, el respeto por la herencia de la tradición son los elementos de una búsqueda diaria de la calidad. Cada creación interpreta una historia de 200 años y expresa el arte y la sabiduría de verdaderos maestros del gusto.